Rumbo a la bastida de Monpazier, en el sureste de la región de Bergerac. ¿Has dicho bastida? Una bastida se dispone en torno a un plano octogonal en damero con un mercado central. Hay entre 300 y 400 bastidas catalogadas en el suroeste de Francia... y adivina, adivinanza: Monpazier está considerada la bastida "más interesante y mejor conservada de todas las bastidas del suroeste". Vayamos pues a Monpazier, que apenas ha notado el paso del tiempo desde su fundación en 1284.
Un lugar para perderse por sus callecitas estrechas, observar los cazals, transitar bajo las arcadas, conocer las antiguas medidas de grano, recorrer el mercado de 700 años de antigüedad y conocer la puerta del paraíso.
En todo este trayecto tendrás vistas sobre la campiña circundante. No muy lejos de allí, el imponente castillo de Biron resguarda la bastida. Como anécdota, el propietario, Pierre de Gontaut, barón de Biron, cedió en 1284 todo el terreno necesario para construir la bastida de Monpazier...
Buena noticia: el castillo está a 2 pasos y abre todo el año. Desde el punto de vista arquitectónico, se trata de una increíble yuxtaposición de edificios del siglo XII al XVIII. En los últimos años se ha convertido además en un enclave imprescindible para el arte contemporáneo de Dordoña, ofreciéndose talleres en el espacio. ¡Vamos allá!